Mireia Belmonte ya está en el CAR entrenando a tope. Sin descanso pese a que este fin de semana ha sido de lo más duro para la nadadora badalonesa por tomar parte en hasta nueve pruebas del Campeonato de España de invierno celebrado en Gijón.
"Un buen inicio de temporada"
El balance que hace Mireia de su actuación no puede ser mejor: "Hago un balance muy positivo. Ha sido un buen inicio de temporada, pero esto es solo el primer paso", considera para añadir que "esta es la base y tenemos que ir a más", sentencia.
Belmonte reconoce que "los hombros no están perfectos pero he cogido más musculatura y estoy mucho mejor", algo básico para que la nadadora se sienta con ganas de trabajar.
"La recuperación me hace ser optimista porque todo es diferente, puedo trabajar mejor, sin molestias y es todo más fácil", dijo en el acto en el CAR en el que entregaron la medalla de bronce al mérito deportivo a su entrenador Fred Vergnoux.
Feliz por su entrenador, Fred Vergnoux
Habitualmente es a ella a quien le dan los premios, pero por su cara en el acto se adivina que le hace igual ilusión que sea su entrenador el galardonado: "Fred ya ha entrado en la familia de la Real Órden del Mérito Deportivo y esto es un paso muy importante y la próxima que tiene que conseguir es la de plata y así tendrá un objetivo más", dijo.
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Está claro que solo si Belmonte sigue en lo más alto Vergnoux conseguirá más medallas. Mireia lo tiene claro: "Ello no dependerá solo de mis éxitos sino del trabajo conjunto".