Griezmann recupera la sonrisa con una exhibición

Dos años en el Camp Nou bastaron para dejar claro que no era jugador para el Barça. O esta es una de las afirmaciones que más se hace en la masa azulgrana. Incluso de Laporta. Seguramente tienen más razón que un santo pero Antoine, cuando no viste la camiseta del Barça se empeña en negar la mayor. Dos golazos para enmarcar y pudieron ser más.

El conjunto de Deschamps salió con mucho más dinamismo que en los últimos dos partidos clasificatorios donde no pasaron del empate. Los tres centrales atrás permitieron a Theo apuntarse al ataque. Precisamente el jugador del Milan tuvo la primera del partido con un tiro raso que se marchó rozando el palo izquierdo de la portería de Hradecky.

Finlandia no se arrugó y siguió mostrando que la solidez defensiva de los actuales campeones del mundo no es la de antaño. Un centro de Schüller rematado por Välsänen casi silencia el Groupama Stadium. Quizás fue el punto de inflexión para una Francia que se agarró a la asociación Greizmann-Benzema para adelantarse en el marcador.

Ambos combinaron en un primer aviso donde el portero finlandés le sacó el gol a Karim. El cambio de papeles sí funcionó. Fue el jugador del Madrid el que la cedió casi de tacón a Antoine y el flamante jugador del Atlético la mandó para dentro con un toque de exterior, pura obra de arte.

Se lo estaba pasando en grande Francia y más todavía 'el principito'. Estaba en todos lados y en la segunda mitad, los dos socios aparecieron de nuevo. Benzema se zafó de dos jugadores de Finlandia con una finta y suave toque al alcance de pocos, combinó con Dubois y el pase para Griezmann, que casi se pierde por la línea de fondo, lo mandó al fondo de las mallas sin ángulo el ex azulgrana.

Es absolutamente increíble como le cambia la cara al '7' francés cuando vista la elástica 'bleu'. Y la tuvo para el 'hat-trick' que si llega a entrar, era candidato al premio Puskas. No por el remate de 'Griezzie', sino por la jugada combinada entre los jugadores franceses. Francia aflojó pero volvió a ganar, por fin. Cinco partidos después.