El centrocampista danés William Kvist regresará este domingo a la concentración de Dinamarca en el Mundial de Rusia 2018 para reincorporarse a los entrenamientos una semana después de fracturarse una costilla en el partido contra Perú.
Kvist sufrió un choque con el delantero peruano Jefferson Farfán el pasado día 16 en el debut de ambos equipos en el grupo C, a la media hora de juego, y tuvo que salir del campo en camilla.
Las primeras pruebas apuntaban a dos costillas rotas y una perforación en el pulmón, aunque al llegar a Dinamarca se descubrió que solo había una costilla fracturada.
"No tiene muchos dolores, como cabría imaginar tras romperse una costilla. Han pasado unos días y ya puede correr y entrenarse", declaró este domingo al canal TV2 el seleccionador danés, Åge Hareide.
Disponible para octavos
Hareide descartó al mediocentro del Copenhague para el partido del martes contra Francia, pero abrió las puertas a que pudiese estar listo para un hipotético encuentro de octavos de final.
"Viajo para ayudar, no voy de turista, sino daría igual. Me reincorporaré al grupo, poco a poco, pero estoy listo para contribuir", afirmó a la televisión pública DR el jugador, que ya se ha entrenado por su cuenta y apenas tiene dolores.
NOTICIAS RELACIONADAS
El jugador, de 33 años, aseguró que "casi" puede hacer de todo, aunque necesita llevar una protección. Kvist ha sido el mediocentro defensivo titular de Dinamarca durante toda la fase de clasificación, un jugador muy valorado por Hareide por su sentido táctico y cuyo puesto había ocupado contra Australia Lasse Schöne, de perfil más ofensivo.