La selección española se ha olvidado este lunes de posibles especulaciones y no ha vacilado a la hora de superar por 36-28 a una Hungría que reservó a sus mejores jugadores en el cierre del Grupo I de la Ronda Principal del Mundial de Egipto.
Muy 'tocados' en minutos jugados, el central Máté Lékai y el pivote Bence Bánhidi ni siquiera se vistieron, mientras István Gulyás y el español Chema Rodríguez dieron también descanso a la mayoría de 'pesos pesados' del equipo.
Pese a ello, los Hispanos se tomaron el partido muy en serio y se enfrentarán el miércoles en cuartos de final al segundo clasificado del Grupo II, Noruega con Sandor Sagosen como gran figura (verdugo del Barça con el Kiel en la pasada final de la Champions). Por su parte, Hungría se verá las caras con Francia.
España llevó siempre el peso de la primera parte con una defensa compacta, múltiples recuperaciones y una notable labor de Gonzalo Pérez de Vargas que permitieron a Ferran Solé irse a los vestuarios con un espectacular 8/8, muchos de ellos a la contra.
Con una magistral dirección del azulgrana Raúl Entrerríos, España ya tenía cuatro goles de renta a los 10 minutos (7-3), aunque dos exclusiones seguidas de Joan Cañellas y de Jorge Maqueda permitieron a los húngaros marcar tres tantos a puerta vacía tras sendas pérdidas de Álex Dujshebaev (8-8 en el 15').
Raúl Entrerríos trata de frenar a Zsolt Balogh
| EFESalvo esa pequeña desconexión y los problemas que creaba en defensa Zsolt Balogh, los Hispanos volvieron a poner la directa desde la defensa y tres goles seguidos de Solé volvieron a disparar a los vigentes campeones de Europa (14-10 en el 21').
En la recta final del primer tiempo los de Jordi Ribera pasaron por encima de Hungría con su habitual balonmano: defensa, buena portería, contragolpe y precisión. El resultado al descanso lo dice todo: 21-14.
De regreso al partido, los húngaros lo intentaron dando entrada a Mathé y a Bodo e incluso se acercaron a cinco goles (21-16) antes de que se desatase la gran 'tormenta'.
Álex Dujshebaev busca el lanzamiento ante Hungría
| EFECon un Pérez de Vargas de otro planeta (llegó a estar en 16 paradas y 15 goles recibidos), España consiguió un parcial de 7-0 con 'dobletes' de Maqueda y de Aleix Gómez para situarse 28-16 a 15 minutos del final.
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El partido ya se había terminado y solo faltaba saber cómo se cerraría a nivel numérico la segunda mayor goleada de los Hispanos en el Mundial tras el 23-38 ante Uruguay. Al final. 36-28 y... ¡que pasen los noruegos!