Una fractura en la clavícula derecha por stress ha hecho que Dani Pedrosa no se haya podido emplear a fondo en su nuevo campo profesional como probador de KTM. Dicha lesión, que le obligó a tener que someterse a una nueva técnica de operación con sus propias celulas madre, le han apartado hasta esta semana de poder empezar su nuevo trabajo en la fábrica austríaca.
Hasta estos últimos días. Y es que este mismo martes y miércoles, Pedrosa ya se ha podido subir a la moto que pilotan Pol Espargaró y Johann Zarco en el Mundial de MotoGP. Lo ha hecho en unos tests privados en el Autodromo de Mugello en los que ha confirmado su casi total recuperación de la lesión explicada.
"Fue emocionante ver a Pedrosa en Mugello y comprobar que está preparado para comenzar su nuevo trabajo para nosotros; todos sabemos cuán estrechas son las distancias y el altísimo nivel de MotoGP en 2019, por eso su experiencia y conocimientos nos puede ayudar mucho", señaló el responsable del equipo KTM, Mike Leitner.
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Desde la propia fábrica austríaca han confirmado que esperan que la recuperación del de Castellar del Vallès esté completa ya al 100% para poder estar y participar en el test del próximo mes de junio en Montmeló una vez se haya celebrado el GP de Catalunya.