Andrea Iannone sigue sin recuperarse de la lesión en la vértebra D3 que sufrió en los entrenamientos libres del GP de San Marino, a mediados de septiembre. Sus problemas le han hecho perderse ya las carreras de Misano, Aragón, Japón y este fin de semana tampoco estará en Australia. Una circunstancia que hizo que Ducati pensara en ofrecerle a su probador de lujo, Casey Stoner, poder volver a pilotar en el Mundial.
Ante la negativa del doble campeón del mundo ha sido Héctor Barberá el elegido, pero este jueves, Marc Márquez ha lamentado que Stoner rechazara la invitación e incluso le ha retado que se lo piense dos veces "y acepte correr alguna carrera".
El flamante campeón ha asegurado que "Stoner es un piloto que siempre me ha gustado porque tiene unas características parecidas a las mías. Es muy agresivo y muy rápido a una vuelta. Me hubiera gustado que Casey corriera, porque es con el único ‘grande’ al que no me he podido enfrentar”.
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“Siempre he dicho que me gusta medirme a todos los corredores rápidos, para intentar aprender de ellos. Así que ojalá se lo piense de nuevo y acepte correr alguna carrera” ha insistido Márquez. Un desafío en toda regla.