Lo justo y necesario tardó Marc Márquez en volver a copar portadas en el Mundial de MotoGP. El líder de Honda fue capaz de domar a su nuevo chasis para pelear hasta el último instante por una Pole Position que solo 'Pecco' Bagnaia fue capaz de arrebatarle.
El ocho veces campeón del mundo, que se fue al suelo hasta en dos ocasiones durante la jornada del viernes, pudo meterse directamente en Q2, algo que no pudo conseguir ningún otro piloto del ala dorada, ni ayer ni hoy a través de la Q1 (P14-P16-P18).
El #93 de MotoGP, ya en el parque cerrado, reconocía que "estar en el podio de la Sprint Race va a ser complicado. No es que sea excesivamente prudente, ya sabéis que soy muy ambicioso, pero creo que con un Top8 nos podemos dar por satisfechos".
Marc quiso tocar de pies en el suelo y ser "realista, sin ningún tipo de expectativa. Veremos qué pasa en carrera, que es dónde habrá que hablar de verdad".
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"No esperaba estar tan arriba. Ayer estaba rápido pero no sentía la moto, hoy ya sí. La cosa ha ido mucho mejor y, aunque estoy muy contento, sigo sorprendido de poder estar en primera fila. Sufriremos un poco en la carrera al Sprint, pero intentaremos estar ahí", comentaba Marc Márquez, que se quedó muy, muy cerca de conseguir su segunda Pole Position de la temporada tras la cosechada en el Gran Premio inaugural, el de Portugal.