MotoGP clausurará su temporada más atípica en el circuito de Portimao, escenario del Gran Premio de Portugal, del 20 al 22 de noviembre. Para preparar la cita, este miércoles un total de 24 pilotos, entre titulares y probadores de la categoría reina, rodarán en el trazado luso, aunque solo los probadores podrán hacerlo con las MotoGP y los demás tendrán que rodar en motos de serie.
Uno de los grandes alicientes del test, que los probadores podrán repetir en la jornada del jueves, será la presencia en pista del pentacampeón del mundo Jorge Lorenzo, actual piloto de pruebas de Yamaha desde su retirada en 2019.
El balear coincidirá Dani Pedrosa y su KTM. Además de ellos, hoy también participarán en el ensayo Viñales, Rossi, Dovizioso, Miller, Zarco, Crutchlow, Nakagami, Àlex Márquez, Espargaró, Binder, Oliveira, Mir, Bradl, Pirro, Guintoli, Smith y Aleix Espargaró.
Entre las curiosidades del día, veremos a Pol Espargaró, actual piloto de KTM y que en 2021 cambiará a Honda, rodar sobre una superbike de la marca japonesa, ya que los austríacos no disponen de montura.
NUEVE MESES DESPUÉS
El estado de forma de Jorge Lorenzo incógnita después de un largo periodo de inactividad. Su único bagage con la Yamaha 2020 se remonta a 20 vueltas en Sepang, en febrero. “El objetivo en Portimao es reencontrarme con la moto. Nunca había tenido tantos meses de parón y no será fácil. Además, es un circuito complicado”, explicó el mallorquín.
Jorge tiene intención de convencer a Yamaha para renovar como probador:“Es el trabajo perfecto para mí”, dice el piloto, que meses atrás descartó volver al Mundial a tiempo completo con Ducati. "Demasiada presión, prefiero disfrutar de la vida", argumenta.
Al llegar a Portimao, se llevó una sorpresa negativa: en el box no estaba la M1 actual sino la de 2019."Llevaré la misma moto que en Sepang, no la nueva, no pudieron traerla. Me dedicaré a buscar el cambio de marchas y los neumáticos para este asfalto. Ese será mi primer objetivo, pero también, como tercera parte, jugar con la configuración, pero como es la moto de 2019 y cambia un poco es menos importante que las marchas y los neumáticos", indicó Lorenzo.
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El pentacampeón no piensa que su marca le esté utilizando menos de lo que le gustaría. "Quiero creer, y realmente creo, que ellos intentaron lo máximo que pudieron hacer los máximos test posibles, pero las circunstancias con el COVID, por distintos motivos, impidieron que esto pasara. Por supuesto, creo que sin el COVID habríamos tenidos esos 15-16 días de test planeados, pero no creo que me estén desperdiciando, especialmente a propósito, como piloto de pruebas porque creo que, hablando económicamente, puede ser la fábrica que gasta más dinero en ello. Con lo que no es lógico pensar así. Realmente, creo que las circunstancias del COVID no ayudaron al equipo a probar más", concluyó el piloto mallorquín.