Jorge Lorenzo ha viajado a Japón este lunes con la intención de participar en el gran premio que se celebra este fin de semana en el circuito de Motegi. Tras irse al suelo en la primera curva del GP de Aragón y volver a caerse en el segundo libre de Tailandia, el balear aterriza en el país del Sol Naciente convaleciente de una fractura en el radio de su brazo derecho y mucho más recuperado de la fractura del dedo de pie que se produjo en su primera caída, en MotorLand.
Los dos incidentes seguidos le obligaron a descartar correr en Buriram y no le permitirán llegar a tope Japón, pero Lorenzo quiere despedirse con buen sabor de boca en sus últimas cuatro carreras como piloto Ducati.
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Ante la remota opción de pelear por su compañero Andrea Dovizioso por el subcampeonato, el 99 tiene el aliciente de cerrar su capítulo vestido de rojo con las máximas victorias posibles (suma tres, igual que Dovizioso) de aquí hasta el final de temporada en Valencia. Después, Jorge se subirá ya la Honda como compañero de Marc Márquez, que este domingo en Japón afronta su primera 'bola de partido' por el que sería su quinto título de MotoGP y el séptimo de su historial.