Sebastian Vettel tiene cada vez más lejos la opción de arrebatarle el campeonato a Lewis Hamilton que, a falta de cuatro carreras, es líder indiscutido, algo que al parecer no está sentando demasiado bien en el seno de los de Maranello.
Vettel llegó a Ferrari en 2015 con cuatro campeonatos bajo el brazo, conseguidos con RedBull, y la esperanza de devolver a la ‘Scudería’ la corona de campeones. Un objetivo que, de momento, no se ha cumplido y que cada carrera parece menos probable que vaya a suceder en este 2018. Y aunque el alemán cuenta con el apoyo del capo de Ferrari, Maurizio Arrivabene, al menos de cara a la galería, no parece que opinen lo mismo en otros sectores italianos.
Según publica la ‘Gazzetta dello Sport’ a través de la columna del periodista Luigi Perna, el de Heppenheim estaría “aislado” y perdiendo apoyos dentro de su equipo a la misma velocidad que pierde puntos respecto a su rival en el campeonato, Lewis Hamilton. Especialmente tras los errores cometidos en esta última fase de un Mundial en el que parecía que Ferrari había encontrado el coche capaz de batir a los Mercedes. Un Ferrari hecho a medida para Vettel y que no ha sido suficiente. El rotativo italiano afirma además en el artículo titulado 'Radiografía di una crisi' que, si Sebastian Vettel no consigue el ansiado título en 2019, el equipo podría rescindir a final de esa temporada el contrato que vincula al alemán con los de Maranello hasta 2020.
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En Austin, si el Hamilton consigue la victoria, Seb está obligado a quedar, como mínimo, segundo, si no quiere poner en bandeja de plata el campeonato a su rival. Sería para Ferrari el undécimo año sin conseguir el premio desde que lo hiciera, precisamente Kimi Raikonnen en 2007.