Carlos Sainz no vivió el final de temporada esperado. El piloto madrileño tuvo que abandonar después de que Palmer le golpeara por detrás y dañara la caja de cambio de su Toro Rosso. "Hasta este punto la carrera ha ido bien, pasando a los Manor y a los Renault en sitios donde no sabía que se podía adelantar, porque en la recta éramos lentos. Ha sido una pena porque no quieres acabar así la temporada", apuntaba Sainz a los micrófonos de Movistar+..
Preguntado qué nota se pondría a esta temporada apuntó que "no me gusta dar notas, ya lo sabéis. Ha sido un año bueno y la últimas carreras también han sido buenas".
Respecto a la próxima temporada dijo que "los coches serán más físicos, habrá que ponerse en forma. A ver si el año que viene conseguimos tener un coche más competitvo. Agradecer a todo el equipo un buen año. A poco que tengamos un motor mejor, mejoraremos".
También quiso destacar que "he crecido como piloto en mi segundo año en la F1, con más experiencia. Conseguir 46 puntos con un coche que iba a menos es impotante".
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Y ahora a estar pendiente de su padre en el Dakar: "Se pasa mal cuando tu padre corre", reconocía.