Daniel Ricciardo ha acaparado la atención en los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Rusia. El piloto australiano ha salido a pista con el nuevo sistema de protección del habitáculo del monoplaza, tipo cabina, diseñado por Red Bull como alternativa al sistema 'Halo' presentado por Mercedes y al arco de seguridad que probó Ferrari en Montmeló.
El artilugio ha tenido buena acogida en general y Ricciardo ha advertido que no condiciona la visibilidad, aunque a nivel estético no todos se has mostrado tan benevolentes. El campeón Lewis Hamilton considera que la cabina de Red Bull "parece de la policía antidisturbios".
El team principal de Red Bull, Christian Horner ha hecho una valoración positiva: "En cuanto a la visibilidad, Ricciardo no ha tenido ningún problema. Lo más reseñable ha sido que no escuchaba el ruido del viento, eso ha sido lo más diferente. Pero en cuanto a la visibilidad no ha tenido ningún problema".
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La FIA recibirá ahora el informe que elaboren los técnicos de Milton Keynes, que quieren testar la cabina también en condiciones de lluvia. El próximo año la federación y los equipos deben consensuar un sistema de protección de la cabeza del piloto para minimizar el riesgo en caso de impactos de piezas que salgan despedidas de otros coches en pista.