Carlos Sainz ha terminado exhausto pero muy satisfecho pot su victoria en la undécima y penúltima etapa del Dakar, una de las más complicadas en cuanto a terreno y navegación en la presente edición. El madrileño, que ya suma dos triunfos parciales al volante del nuevo Audi impulsado por energía eléctrica, ha celebrado en meta su éxito y el de su equipo.
"Estoy muy contento con la etapa y el coche ha ido muy bien, sin problemas. Ha habido de todo: hierba de camello, dunas, más dunas, navegación, rocas, cauces secos. Muy completa y era muy difícil abrir hoy. Lucas ha hecho un gran trabajo con la navegación. Nos hemos cruzado con Stéphane que volvía en busca de un punto que buscábamos nosotros también, pero luego no lo hemos visto más", ha explicado Sainz. "Séb (Loeb) ha llegado después de nosotros y es siempre muy rápido, a ver en qué queda todo" ha apuntado, aunque todo apunta a que este Dakar será para Al-Attiyah.