La séptima etapa del Dakar 2020 estará marcada para siempre por la muerte del piloto portugués Paulo Gonçalves. Un duro varapalo para todos los participantes, especialmente para Toby Price que no pudo hacer nada por socorrer a su compañero de batalla.
El británico, vigente campeón del Rally Dakar, peleaba por la general pero no dudó en parar su moto para intentar ayudar a Gonçalves que había sufrido una caída. Fue el primero en llegar -venía justo detrás del portugués en carrera- y presionar el botón rojo que confirmaba las primeras alertas que había recibido ya la organización. Se ponía en marcha el dispositivo de rescate.
Poco después llegaban el argentino Kevin Benavides que estaba siendo el más rápido en los primeros parciales; y el y el eslovaco Stefan Svitko. Poco importaban en esos momentos la etapa o la general aunque nada pudieron hacer por salvar la vida de su compañero que fue evacuado por las asistencias en helicóptero y llegó sin vida al hospital.
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Los tres pilotos continuaron hasta el final de la etapa en la que Price acabó entrando a más de una hora del campeón. El de KTM que está cuarto de la general, acabó séptimo de la etapa, después de que la organización le devolviese el tiempo que empleó en auxiliar a Gonçalves, como es reglamentario. Quedó así a siete minutos de Benavides quien también recibió la compensación y acabó proclamándose campeón de la etapa en detrimento de Joan Barreda.