Lejos queda ya ese PSG que perdió las dos primeras jornadas y que dejaba malas sensaciones. Los de Tuchel ya carburan y poco a poco van cogiendo ritmo. Esta vez, la víctima fue el Reims, que se salvó de una goleada de escándalo. Tan solo encajaron un doblete de Icardi que permite a los capitalinos sumar su tercera victoria consecutiva.
Poco tardaron en avisar los parisinos. Mbappé dio a entender a la afición presente en el Auguste-Delaune que la tónica habitual sería ver jugadas de ataque en el área de los locales. Y tras la primera intentona del francés, llegó el tanto. Icardi recogió un balón dentro del área y no perdonó. Pero el acoso no cesó. Ni mucho menos. Porque cuando los jugadores de arriba se juntan, siempre hay peligro. Un Neymar soberbio comandaba el juego de los de Tuchel, que barrieron por completo a su rival en el campo y prácticamente no generaron ocasiones. Lo raro era que el resultado al descanso fuera de 1 a 0.
Tras el receso, el ritmo disminuyó. El PSG no quería asumir riesgos y el Reims si hizo fuerte en defensa. Pero los locales pusieron el miedo en el cuerpo a los capitalinos con un trallazo que golpeó en el travesaño. Y lo que es el fútbol. Acto seguido, ocasión clarísima de Neymar y gol de Icardi en una nueva asistencia de Mbappé. Un minuto de locura.
NOTICIAS RELACIONADAS
Allí, pese al ejercicio de valentía que hicieron los de Guion, el partido murió con dos goles de diferencia, aunque pudieron haber sido muchos más. Parece que el PSG tan solo está calentando.