El Sevilla se aprovechó de un errático Levante y consiguió una histórica goleada por 2-6, marcando en una sola jornada más goles de los que llevaba en las cuatro anteriores (4 tantos) y mostrando la efectividad que se le reclamaba.
Los de Pablo Machín llegaron a Valencia con la memoria de haber caído 0-2 en casa en su último duelo liguero contra el Getafe, a pesar de haber tenido una oportunidad de redención con la buena goleada 5-1 conseguida ante el Standard de Lieja por la Europa League. Era el día para alejar los fantasmas y sacar la artillería pesada. Y así lo hicieron.
Tres de las anotaciones llegaron gracias al aporte de Wisam Ben Yedder. La primera fue para abrir el marcador, culminando una gran jugada colectiva tras pase de Sarabia. La segunda, nuevamente en combinación con el exReal Madrid Castilla, llegó tras un perfecto contraataque. Y la tercera la consiguió valiéndose de un error garrafal de Oier, quien tuvo mantequilla en sus manos para retener un centro y dejço el balón servido en bandeja de plata al francés para que rematara.
Los otros tres goles hispalenses fueron obra de Daniel Carriço de cabeza, importantísimo para inclinar la balanza a su favor, y el decorado de la goleada con el quinto gol de Sarabia y el sexto de André Silva. Por parte del equipo valenciano Roger Martí empató transitoriamente a los 13', cuando la esperanza aún vivía, y Simon propició el gol en propia puerta de Kjaer para maquillar un poco el tanteador.
El Levante pudo tener la chance de cambiar el rumbo del partido con un cobro desde el punto penal cuando las acciones iban 1-2, pero Vaclik apareció como un gato para salvar el disparo de Pedro Morales y puso su granito de arena en la goleada de los suyos.
NOTICIAS RELACIONADAS
Con esta fundamental y contundente victoria, el Sevilla llega con el pecho inflado al Ramón Sánchez Pizjuan para recibir al Real Madrid en la jornada del miércoles, buscando ratificar el buen momento que viven y demostrar que la pólvora, por fin, está seca y lista para seguirse detonando.