El Atlético concluye la primera vuelta con los deberes hechos y en una posición que tan solo sus aficionados más optimistas podían pensar al inicio de temporada, cuando el equipo de Diego Simeone flojeaba. Los colchoneros, a falta del partido pendiente que tiene el Barça ante el Sporting, están aupados a lo más alto de la tabla y continúan exhibiendo una solidez incuestionable.
El regreso de Augusto a Balaídos quedó en un segundo plano porque el principal protagonista volvió a ser Antoine Griezmann, la gran joya del equipo de Simeone, El francés protagonizó las mejores jugadas de un regular primer tiempo y abrió la lata en los primeros compases de la reanudación, culminando una jugada de fantasía rojiblanca.
NOTICIAS RELACIONADAS
Se temía por el estado del césped de Balaídos por la tromba de agua caída en los últimos días pero el feudo celeste mostró un drenaje impresionante. Sin condicionantes, el Atlético exhibió su mejor estado de forma y el Celta apenas se dejó ver ante Oblak. Con la solidez habitual, los de Simeone aprovecharon una contra para sentenciar.