La salida de Antoine Griezmann le saldra cara al Atlético. El club colchonero ingresará 120 millones por el delantero francés, según estipula su cláusula de rescisión y esa inyección de dinero ya le está jugando en contra a la hora de cerrar refuerzos.
El Atlético había puesto su punto de mira en Eidson Cavani. Por su edad (32 años) y su situación contractual (queda libre en junio del 2020), el delantero uruguayo se presentaba como un fichaje asequible para suplir a Griezmann o paliar la eventual salida de Diego Costa. Y tenía el visto bueno del futbolista.
El club colchonero se ha encontrado con una sorpresa cuando ha tanteado el inicio de las negociaciones con el PSG. Según una información de 'MSN France', la entidad parisina se habría descolgado con unas pretensiones desorbitadas: 50 millones.
El PSG es consciente de que en un año ni ingresará ni un céntimo por Cavani, pero aún así está dispuesto a forzar la máquina hasta el final, más teniendo en cuenta que la vigilancia de la UEFA por el 'fair play financiero' le obliga a ingresar dinero para afrontar el capítulo de refuerzos.
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El Atlético se ha encontrado con un duro golpe a sus aspiraciones, pero no tira la toalla y confía en hacer entrar en razón a los parisinos.