Se lo dejaron todo para el final Valencia y Alavés en un encuentro que se decidió el epílogo. Gayà, en el último minuto, salvó un punto de oro ante los babazorros, que recibieron un jarro de agua fría y van a tener que seguir pelando para eludir el descenso. La nota positiva: con Calleja todavía no han perdido.
Desde el primer minuto el Valencia quería hacerse con el dominio. En su feudo se tienen que hacer fuertes y eso pasa por ser superiores a su rival durante todo momento. Y el protagonista durante el primer tiempo fue un revitalizado Gonçalo Guedes. Tras meses -incluso algún año- en el ostracismo, el luso ha despertado y vuelve a ser el de antes. Rápido, activo, con confianza y desborde. De hecho, la inmensa mayoría de ataques ches empezaban en sus botas. Gracia optó por jugar con dos nueves puros: Maxi Gómez y Gameiro, y eso propició numerosos envíos al área, aunque todos sin encontrar rematador. El Alavés, cerrado, seguía ceñido a su plan. Aguantar atrás y esperar la suya. Le pudo funcionar en los primeros compases, pues su única llegada terminó en gol, pero el asistente lo anuló por fuera de juego previo.
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Apenas varió el guion tras el receso. Y ese encuentro plano, sin ocasiones, lo desequilibró Gameiro, aunque el VAR anuló el tanto del francés por posición antirreglamentaria de Maxi Gómez. Enloqueció el partido en los últimos minutos. Con el 'Glorioso' un tanto mejor, Guidetti parecía dar una victoria balsámica cazando un rebote dentro del área, pero sobre la bocina, apareció Gayà para embocar un rechace de Pacheco y dar un punto que permite a los ches respirar un poco más tranquilos. Pero todavía quedan muchos puntos. Valencia y Alavés lucharán hasta el final.