El partido de Copa del Rey entre el Valencia y el Getafe dejó muchas imágenes. Una de ellas fue el rostro de Gabriel Paulista, central del conjunto azulón, que terminó el encuentro con la cara ensangrentada y con la ceja rota.
El corte no fue a raíz de la multitudinaria tangana que se formó al finalizar el encuentro en Mestalla entre jugadores de ambos equipos. Gabriel se lo hizo en los últimos instantes cuando en un lance chocó con la cabeza de su compañero en el eje de la zaga Garay. Ambos compartieron una fotografía con el lema “hay que morir siempre dentro del campo”, con una imagen de los puntos que Gabriel llevaba en la ceja.