Ha empezado una nueva era. Después de tres temporadas de sequía, el Barcelona vuelve a ser campeón. El equipo azulgrana, en plena reconstrucción deportiva y condicionado por las estrecheces económicas, aprendió a competir. Ningún otro aspirante se acdercó a su regularidad. Los de Xavi Hernández tomaron el liderato en la jornada 13 y ya no lo soltaron.
En gran medida, gracias a la solidez defensiva: 20 goles encajados en 38 partidos. Gran parte del mérito es de Ter Stegen, el portero menos goleado y más determinante de la competición, sin olvidar la solidez en la zaga de Koundé, Christensen y Araujo.
En el carril izquierdo, Balde ha sido la gran revelación del plantel, el relevo generacional de Jordi Alba, que al igual que Busquets ha brindado su último servicio al club. En ataque, los goles de Lewandowski, pichichi con 23 dianas, compensaron el bajón de juego sin Pedri, lastrado por las lesiones.
En cambio, el Madrid fue demasiado inconsistente y la sensacional segunda vuelta del Atleti, con un Griezmann pletórico, no alcanzó a revertir su mala primera parte del curso. La peor noticia fue el descenso del Espanyol, condenado por su fragilidad defensiva. Y el Girona, en un año espectacular, rozó la zona europea.
La figura: Ter Stegen
Con 31 años, el alemán recuperó su mejor versión y fue el jugador más determinante del campeonato. Fue el arquero menos goleado, con 18 tantos encajados en 38 partidos, y puso el cerrojo en la portería en 26 jornadas. Un seguro que valió media liga.
La revelación: Gabri Veiga
El centrocampista del Celta ha sido la gran revelación del curso en LaLiga. A parte de registrar 11 goles y 4 asistencias, el jugador de Porriño, de 21 años, ha demostrado una ascendencia impropia para su edad. Visión de juego, sacrificio, llegada desde segunda línea y un genial golpeo. Un cóctel de lo más prometedor.
El Real Madrid, campeón de la Copa del Rey
El Real Madrid salvó la temporada gracias a la Copa del Rey. La remontada en el Camp Nou (0-4) en semifinales abrió al conjunto de Ancelotti las puertas de la final, donde batió a Osasuna para levantar el título por primera vez desde 2014. Un duro revés para el cuadro rojillo, que realizó un torneo épico y rozó la epopeya.
Once ideal
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Ter Stegen (Barcelona); Arnau Martínez (Girona), Araujo (Barcelona), Pau Torres (Villarreal), Balde (Barcelona); Pedri (Barcelona), Zubimendi (Real Sociedad), Gabri Veiga (Celta); Griezmann (Atlético), Lewandowski (Barcelona) y Vinicius (Real Madrid).