El homenaje que el Celta rindió este lunes al pueblo gallego fue doble. El cuadro celeste dio una alegría por partida doble a los suyos en medio de unas horas tan complicadas. Los pupilos de Juan Carlos Unzué saltaron al césped del Estadio de Gran Canaria luciendo unas camisetas negras con diversos lemas en honor a las víctimas de los incendios que han devastado el territorio gallego esta semana y que ya se han cobrado cuatro víctimas mortales.
"Dor e rabia" (dolor y rabia) rezaban las camisetas en su parte frontal, mientras que en el dorso aparecían tres sentidos hashtags que también rendían tributo a los graves incendios que también han azotado al pueblo asturiano y a la vecina Portugal: #QueimanGalicia, #QueimanAsturias y #QueimanPortugal.
La plantilla de Las Palmas quiso secundar a su rival deportivo sobre el césped y los pupilos de Pako Ayestarán acompañaron a los celestes en su salida al césped luciendo las mismas camisetas. El rostro de los 22 jugadores evidenciaba que la previa del choque había estado claramente marcada por el triste episodio de los incendios que han consternado a todo el país quince años después de la terrible tragedia que supuso el hundimiento del 'Prestige' y que también tuvo consecuencias devastadoras para la prolífica flora y fauna de la comunidad gallega.
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Tanto Celta como Las Palmas culminaron su homenaje con un protocolario y respetado minuto de silencio en el círculo central del terreno de juego en el que se rindió tributo a las víctimas mortales que se han cobrado los diversos incendios. En el marcador electrónico del Estadio de Gran Canaria lució, al mismo tiempo, un crespón negro. El 2-5 final supuso una enorme alegría para el medio centenar de aficionados del Celta desplazados al estadio. Un triunfo agridulce e inolvidable.