Día 21 de agosto de 1913, el Athletic juega su primer partido en la que ha sido su casa durante casi 100 años, hecho por el que se ovacionó durante 100 segundos a modo de aplauso en homenaje a uno de los estadios con más historia de Europa: La Catedral.
Los 40.000 aficionados que se dieron cita en San Mamés para asistir al último partido oficial en el estadio bilbaíno antes de que sea demolido no dejaron que fuese como un partido más el que enfrentó a su Bilbao con el Levante.
Las sensaciones de nostalgia y alegría se mezclaban en una afición que vivió un partido histórico, que el Bilbao acabó perdiendo por un gol.
El capitán del Athletic, Carlos Gurpegui y el del Levante, Vicente Iborra, acompañados por el jugador más joven de la cantera rojiblanca se dirigieron, al término del encuentro, al centro del campo para depositar un ramo de flores y el balón con el que se jugó el último partido.
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Las estadísticas en La Catedral son envidiables: se han jugado 1.738 partidos, de los que el Bilbao ha ganado 1.154, 317 los ha empatado y 267 los ha perdido con 4.314 goles a favor y 1.736 goles en contra.