El Barça se sobrepuso a la derrota en la jornada inicial de la OK Liga en la pista del Liceo y endosó una contundente goleada al Girona en su estreno en el Palau.
Los azulgranas, que recuperaban al lesionados Pau Bargalló,se encontraron con muchos problemas en el primer tramo del partido para doblegar la resistencia visitante. De hecho, tras inugurar el marcador, los azulgranas vieron como el Girona igualaba el encuentro tras una falta directa transformada por Gerard Pujol. Un escenario que havía presagiar un encuentro equilibrado.
Nada más lejos de la realidad porque el equipo de Edu Castro se puso las pilas, apretó los dientes atrás y comenzó a jugar con fluidez en ataque. Fruto de ello fueron cuatro goles que dejaban el duelo al descanso prácticamente visto para sentencia.
Un resultado que ya condicionó el segundo periodo que finalizaría con un parcial de 3-1 para el Barça lo que dejaría el resultado del pulso en el definitivo 8.2.
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En el capítulo de destacados hay que referirse a Pablo Álvarez.El argentino, que aún tuvo que jugar con máscara protectora, fue el más preclaro de cara a las portería rival con tres dianas en su haber.