Muchos dudaban del regreso de Tiger Woods, es más, él mismo dudaba de su retorno al campo tras sufrir muchos problemas personales y varios malestares en la espalda, sin embargo, el domingo 23 de septiembre quedará marcado en su memoria, pues tras cinco años de no ganar un solo torneo, consiguió el Tour Championship en el East Lake Golf Club de Atlanta, en su natal Estados Unidos.
Con 11 golpes bajo par, dos de ventaja sobre Billy Horschel y cuatro sobre Dustin Johnson, Tiger Woods se convirtió en el campeón de este torneo con un público a la expectativa de su actuación, en el que el golfista tuvo que contener las lágrimas por la grandiosa victoria conseguida.
"He tenido que luchar durante todo el día, pero me ha encantado esta jornada. Era un gran desafío a principios de año el pensar que podía volver a ganar, pero a lo largo de las competiciones vi que todo era posible", sentenció Woods.
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En este año, Tiger Woods había quedado segundo en la FedEx Cup, no obstante, el domingo cambió la historia con la obtención de este título, que significa el número 80 en su gran carrera y que le permite estar a sólo dos de empatar al gran Sam Snead.