El partido que disputa el Cádiz con el Girona válido por la jornada 21 de LaLiga Santander estuvo en serio peligro de suspensión en la previa debido a los fuertes vientos que azotan la ciudad y las cercanías del Nuevo Mirandilla, estadio gaditano, se han visto afectadas.
Según informó Rubén López, periodista de 'COPE' en Cádiz, el partido se llevará adelante a pesar de la alerta naranja que hay en la ciudad por viento de levante.
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Será el colegiado del partido, el señor Pulido Santana, quien determine si durante el mismo hace falta suspender por la intensidad de las corrientes de aire que han llegado a superar los 40 kilómetros por hora.