El Girona de Míchel consiguió ayer la primera victoria de la pretemporada al imponerse al Espanyol B, de la Segunda RFEF, en el campo de La Vinya. Dos tantos tempraneros de Cristhian Stuani allanaron el camino para los rojiblancos, muy superiores en los primeros compases. El uruguayo culminó una buena asistencia de Samu Sáiz y remató después con la cabeza un pase de Gumbau.
Ezzarfani recortó distancias antes de la media hora aprovechando un mal entendimiento de la defensa, que se quedó pidiendo un fuera de juego que no fue señalado, y el equipo, poco a poco, se fue apagando.
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Apenas generó peligro en el segundo tiempo, con un testarazo de Bernardo en el larguero y un gol de Gabri anulado porque el Girona se encontraba, en ese preciso momento, con 12 jugadores en el terreno de juego. Para evitar un susto el joven Ureña cerró la victoria en los últimos minutos.