Savinho y Dovbyk certifican una merecida tercera plaza

El sueño de la segunda plaza no se hizo realidad. El Barça ganó al Rayo Vallecano (3-0). Pero el Girona logró amarrar y certificar una merecidísima tercera posición después de desplegar un buen fútbol y mostrar una gran versión lejos de Montilivi.

Míchel sacaba a 'pasear' su once (casi) de gala. Miguel y Yan Couto eran dos de las ausencias más destacadas en Mestalla y tuvo que alinear a Arnau en el carril derecho y desplazar a Blind al izquierdo. Las demás piezas, las habituales.

Eso sí, que Blind tuviera que ejercer de lateral no le privaría de actuar de tercer central junto a David López y Eric para dejar la banda libre para Savinho.

Uno de los recursos más usados en una salida que fue limpia y efectiva en casi todo momento, fue el de romper líneas con el desplazamiento largo - y milimétrico - de David a Savinho. Y salió bastante bien.

El central, incluso, estuvo a punto de sorprender a Mamardashvili con un disparo casi desde su casa. El georgiano se colgó del larguero y se confió en exceso, porque el balón pasó más cerca de lo que se pensaba. Y aquella fue la primera de tantas ocasiones del Girona en la primera mitad.

EL 'KILLER' PERDONÓ... Y LA 'SAMBA' APARECIÓ

Tsygankov - que envió un latigazo directo al palo corto -, Yangel, David López - que casi se la 'quitó' a un venezolano que llegaba mejor al remate -... todos ellos 'pecaron'. Incluso Dovbyk, que falló inexplicablemente un tiro a puerta vacía. Y se vistió de héroe el que estaba siendo el mejor.

Ya había realizado una conducción marca de casa, y desde su propia área, minutos antes, para dejar constancia de su 'samba' sobre el césped de Mestalla. Y adelantó al Girona en el marcador tras rematar a placer un pase atrás de un Tsygankov que realizó un buen desmarque a pase de Aleix.

Sin embargo, en la siguiente acción, estuvieron a nada de encajar el gol del empate. El Valencia se fue a la 'contra' y Arnau ni David no pudieron defender peor a un Sergi Canós que con un control orientado se deshizo de ambos. Se quedó solo y cruzó en exceso un balón que tenía que ser gol.

DOVBYK RETA A SORLOTH

Parecía que Artem sabía que Sorloth se estaba 'hinchando' a goles en La Cerámica. Cuatro goles para ser exactos. Que sirvieron para empatar el partido ante el Madrid. Y claro, no quería perder su oportunidad de ser el máximo realizador de la competición.

Iván Martín ingresó al área e hizo magia: se inventó una 'croqueta' y disparó al palo largo, pero no sabía que asistiría a su compañero, que remató casi sin querer.

Y aunque Yaremchuk pudo recortar distancias hasta en dos ocasiones, la dupla ucraniana dijo 'basta' y cerró la goleada gironina en Mestalla. Viktor centró, y aunque Artem hizo el gesto de rematar, el balón impactó en Yarek y se coló en la red.

Pepelu maquilló algo el resultado desde los once metros, después de que Blind cometiera la pena máxima ante Peter Federico.

La tremenda goleada de Osasuna en el Cívitas Metropolitano (1-4), pues, provoca que el Girona se haga dueño y señor de la tercera plaza.