El Girona está realizando un buen inicio de curso, con 7 puntos de 18 posibles que le colocan en el undécimo puesto, igual de cerca de la Conference League como del descenso, pero para llegar a los 53 puntos que pretende el técnico Míchel Sánchez necesita que sus goleadores alcen el vuelo.
Después de seis jornadas de liga, ningún jugador ha llegado todavía a los dos goles. Llevan uno Cristhian Stuani, Taty Castellanos, Samu Sáiz, Reinier Jesus, Oriol Romeu y Arnau Martínez, autor del gol rojiblanco en la derrota contra el Betis (2-1) de la última jornada antes del parón.
El Girona firmó un gran encuentro en el Benito Villamarín y tuvo muchas ocasiones claras para conseguir la victoria, pero acabó perdiendo por su gran déficit en este inicio liguero: la falta de pólvora. Crea muchas ocasiones claras, pero la falta de eficacia impide que el equipo esté más arriba.
Y eso que la situación es buena, ya que se encuentra fuera de las plazas de descenso, a tres puntos, y aventaja a los dos otros equipos ascendidos en puntos (siete, por los cuatro del Almería y el Valladolid) y en goles (siete, por delante de los cuatro del Almería y los tres del Valladolid).
De hecho, en comparación con sus dos aventuras previas en LaLiga Santander, lleva los mismos tantos que en la 2017-2018 (7) y cuatro más que en la 2017-2018. Y está más arriba en la tabla. En la 2017-2018 era décimo séptimo con cinco puntos y en la 2018-2019, duodécimo con ocho. Pero Stuani ya acumulaba dos goles en la 2017-2018 y cinco en la 2018-2019.
El uruguayo ha sido baja en los últimos tres partidos por una arritmia cardíaca benigna, aunque su ausencia no debería prolongarse mucho más. Y en Montilivi confían en que, pese a su edad -35 años que serán 36 en octubre- siga aportando goles.
Stuani es el máximo artillero histórico del Girona, con 107 tantos en 181 partidos, y fue el quinto máximo goleador de la liga en las dos últimas temporadas del club en Primera. En la 2017-2018 terminó con 21 dianas, solo por detrás de Leo Messi, Cristiano Ronaldo, Luis Suárez e Iago Aspas en el pichichi, y en la 2018-2019 consiguió 19 tantos, solo por detrás de Messi, Suárez, Karim Benzema y Aspas.
La temporada pasada anotó 22 tantos y fue pichichi, en una liga que el Girona ya comenzó con un déficit de cara a puerta: en la décima jornada solo había firmado siete goles y era uno de los peores del torneo en dicho aspecto. Pero las ocasiones se empezaron a convertir en goles y terminó con 57.
Además de Stuani, la afición de Montilivi también tiene muchas expectativas en el argentino Taty Castellanos, cedido por el New York City tras destacar en Estados Unidos. Fue el máximo artillero de la MLS pasada, con 19 goles en 32 duelos, y era el máximo goleador actual de la competición estadounidense hasta que llegó al Girona, con 13 tantos en 17 partidos. Ha sido titular en las seis primeras fechas y ha sobresalido por su hambre, pero le falta acierto para convertir las ocasiones que genera.
También falta que empiecen a aportar goles futbolistas como los centrales -6 el curso pasado, entre Bernardo Espinosa (3), Juanpe Ramírez (2) y Santi Bueno (1)- o el mediapunta Rodrigo Riquelme, autor de 8 dianas con el Mirandés en la última campaña.
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El viernes Riquelme ya celebró un doblete con la selección sub-21 ante Rumanía, ratificando un inicio de curso brillante.