Dovbyk da el 'sí quiero' al Atlético

Artem Dovbyk pondrá rumbo al Atlético de Madrid, salvo sorpresa de última hora, claro. El club rojiblanco estaba 'apretando' estos últimos días para cerrar su operación y todo indica a que lo terminará haciendo pronto. Si el adiós de Savinho dolió y dejó un vacío enorme en la plantilla, la del '9' aún lo hará más.

Todo cambió en un abrir y cerrar de ojos. Avanzaba ayer la 'SER que Artem tenía la voluntad de cambiar de aires y marcharse al Atlético. La propuesta es muchísimo mejor, multiplica la que tiene en Girona, y el acuerdo personal con el club era real. Eso sí, el club catalán se remitía a su cláusula de 40 'kilos' y parecía difícil que fuera a negociar con el cuadro rojiblanco.

UNAS 24 HORAS DE 'LOCURA'

Unas horas después, sin embargo, la postura del ucraniano es otra y el Atlético ha dado un acelerón para llevar a cabo la operación. Así pues, Artem ya habría comunicado a la directiva gironina su deseo de jugar en el Cívitas Metropolitano. El 'sí quiero' ya es una realidad.

Ahora, pues, faltará ultimar los últimos detalles del traspaso. Como decíamos, el Girona quiere manterse firme y embolsar los '40 kilos' de su cláusula, pero el Atlético no está demasiado por la labor, no sin las variables. Y la opción que toma más fuerza es la siguiente: una oferta que ronde entre los 30 y 35 millones de euros más variables, para alcanzar esa cifra de 40 que reclama el Girona.

INYECCIÓN ECONÓMICA PARA ENCONTRAR A UN '9'

El lado positivo de todo esto, para ser algo optimistas con la situación, es que el Girona tendrá la suficiente potencia económica para ir a por un '9' de garantías. Una vez se cierre una operación que se hará realidad pronto, debe centrar sus esfuerzos en encontrar a un sustituto de garantías. A un delantero con olfato goleador y que registre unas cifras que como mínimo igualen las del ucraniano el curso pasado.

A su vez, la dirección deportiva deberá de encontrar a su 'nuevo' Savinho. Y es que, ahora, Tsygankov está 'solo' ante el peligro. Queda mucho mercado y al club le esperan unas semanas de duro trabajo en las oficinas.