Con el estreno de Liga ante el Amorebieta cada vez más cerca, el nuevo Girona de Míchel sigue dando pasos hacia adelante y ayer despachó un nuevo test de pretemporada y lo hizo con una victoria tan seria como convicente en Palamós.
Superó a un Costa Brava en plena construcción. Maduró el partido en el primer acto, repleto de llegadas pero falto de puntería. Lo remachó tras el descanso. Los centros teledirigidos de Mojica fueron oro para Nahuel Bustos y Cristhian Stuani, que marcaron los dos tantos del encuentro en apenas diez minutos de diferencia.
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Debutó Juncà, que jugó los segundos 45 minutos mientras que Darío Sarmiento, otro de los fichajes de este verano, no se vistió todavía de corto.