De poder ser tercero y esperar rival en un play-off todavía por resolverse, el Girona sabe que disputará la promoción como quinto clasificado y ante el Almería. La pésima imagen de anoche en el Santo Domingo, con el enésimo despropósito de la temporada a domicilio, tiene buena parte de culpa.
Es cierto que Francisco le dio una vuelta de tuerca al dibujo habitual y que reservó algunos de los titulares habituales, como el pichichi Stuani. Sin embargo, nada que justifique el triste partido de los catalanes, que cayeron en Alcorcón con justicia, demostrando que lejos de Montilivi son de lo más vulnerables.
Aguantó el tipo en el primer tiempo, con Jairo y Valery monopolizando las pocas llegadas en el área rival. Se diluyó en el segundo. Cayó el 1-0 con un inocente penalti de Valery que Samuel Sosa transformó sin pestañear.
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Arribas hizo la herida más grande a un cuarto de hora para el final. No hubo reacción, ni tampoco se esperaba. Debutó Pau Víctor y el joven Ibrahima Kebe volvió a tener minutos.