La llegada de Hazard a Chamartín ha supuesto una auténtica inyección de ilusión para los aficionados blancos.Tras una temporada desastrosa que terminó en el mes de marzo y sin poder luchar por un título en el tramo final, Florentino Pérez quiso dar un golpe sobre la mesa firmando a otro ‘galáctico’ para colocar la primera piedra de un nuevo proyecto.
Es por esto que el presidente del Real Madrid ha desembolsado más de 100 millones al Chelsea. Pero el fichaje del belga trae, con él, numerosas incógnitas. Y es que el ya exjugador del equipo campeón de la Europa League viene para ocupar la banda izquierda del ataque blanco, una posición que muchos le otorgaban a Vinícius Júnior.
El brasileño, una de las pocas notas positivas del madridismo este curso, ve amenazado un puesto que tampoco tenía asegurado con la llegada de 'Zizou' al banquillo blanco. Y es que Hazard, que llega como la nueva estrella del club, obligará al joven jugador a desplazar su posición a la banda derecha o a empezar los encuentros en el banquillo. Vería cambiado su rol, aunque sería una de las principales opciones para revolucionar los partidos en los segundos tiempos, cuando se necesite más electricidad y desborde en el verde.
Más problemas
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Si finalmente ‘Vini’ empezara desde la derecha, se crea otra complicación en el difícil rompecabezas que Zidane tiene que resolver, ya que Bale también parte desde esa posición. Él ya sabe que el preparador galo no cuenta con él para la próxima temporada y tiene muchas papeletas de salir. este verano. No obstante, el exjugador del Tottenham no le va a poner nada fáciles las cosas a Florentino, así que puede terminar viendo los partidos del Bernabéu en la grada. No será nada fácil.