El CE Sabadell regresó a la la Liga SmartBank cinco años después con un heroico play off exprés disputado en tierras andaluzas y culminado con el triunfo ante el Barça B en la final disputada en Marbella. Un éxito que tiene un nombre propio por encima del resto. Antonio Hidalgo fue manteado por los jugadores y duchado en la sala de prensa por un equipo que tuvo a un líder y un guía que un año los ha llevado de salvarse in extremis del descenso a Tercera División a ascender a la categoría de plata del fútbol español.
Hidalgo es uno de los miembros de la ‘Quinta de Troya’ forjada en el Mini Estadi, en la que Xavi Hernández es su máximo exponente. Tras su paso por el Barça tuvo una dilatada trayectoria por clubs como el Málaga o Tenerife, donde dejó poso, y capitaneó también al propio Sabadell en sus últimos años como futbolista profesional. Ya como técnico ha definido un libreto autóctono, en el que el buen trato del balón, la combinación y la valentía han sido señas de identidad. Unos argumentos ahora tan añorados precisamente en Can Barça.
Arriesgó con el Sabadell
El entrenador catalán salvó al Granollers en Tercera Divsión en su primera experiencia y estaba forjando su camino en Chipre, como segundo del AEK Larnaca, cuando recibió una llamada desesperada desde la Nova Creu Alta. El Sabadell se hundía en el pozo de la Segunda División B y Antonio Hidalgo fue la carta de emergencia para tratar de resucitar al equipo con solo siete jornadas por disputarse. Hidalgo dejó su zona de confort en Chipre y se arriesgó con el Sabadell. Cuatro victorias en siete partidos valieron la permanencia y su continuidad otro año.
Con el mismo bloque y solo algunos retoques, como el portero Ian Mackay, el equipo ha dado un vuelco total. Los mismos jugadores que parecían caerse a la Tercera División han mostrado un gran nivel y rebosan confianza. Todo ello con una forma de jugar en la que la pelota siempre tiene protagonismo y variantes tácticas punteras en el fútbol actual. Hidalgo ha jugado con tres centrales, variando a línea de cuatro defiendo y con tres atacando, con profundidad en las bandas y largas posesiones hasta encontrar la mejor opción.
Tándem con Juvenal
El míster ha contado con la ayuda de otro mítico exjugador arlequinado, Juvenal Edjogo. El sabadellense se ha encargado de la estrategia y su carisma lo ha convertido en una pieza clave para subir la autoestima del vestuario.
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Ambos contaron desde el primer día con el respaldo del presidente, Esteve Calzada, quien renovó su confianza a media temporada firmando su prórroga de contrato por dos años más. Varios clubs llamaron a la puerta de Hidalgo, pero seguirá la próxima campaña en la Creu Alta. Al directivo y periodista Áxel Torres se le debe la idea de pensar en Antonio Hidalgo, Esteve Calzada dio el paso y el míster se la jugó. El final de los primeros dos capítulos no ha podido ser más feliz y la historia continuará.