El FC Barcelona ha logrado este sábado su tercera victoria en la tercera jornada de la Elite Round de la Champions tras imponerse en un entretenido encuentro al anfitrión Stalitsa Minsk por 6-1.
Ya clasificado para la Final a Cuatro del mes de abril, los blaugrana tuvieron a Sergio Lozano como gran nombre propio de un mediodía bastante plácido pese al empuje local.
Con su gol a puerta vacía en el último minuto, el madrileño suma ya 248 tantos como azulgrana y supera en uno a Wilde como máximo realizador de la historia de la sección.
De todas formas, sería injusto obviar a Mario Rivillos, quien sigue aprovechando últimamente sus oportunidades y marcó un 'hat-trick' para seguir pidiendo minutos a Andreu Plaza.
Aicardo abre el marcador
Tal y como había anunciado el técnico, los amonestados Daniel Shiraishi, Adolfo y Ferrao no jugaron para evitar el riesgo de una posible sanción de cara a las semifinales como sucedió en la pasada edición con el de Chapecó.
El Barça no tardó en tomar la delantera. Solo habían pasado dos minutos cuando Aicardo, uno de los mejores en esta Elite Round, firmó el 1-0 ante los anfitriones.
Acto seguido, Sergio Lozano estrelló un chut cruzado contra el poste en lo que pudo haber supuesto el récord histórico del Barça que actualmente comparte con Wilde (ambos suman 247 'dianas' azulgranas).
Roger Serrano no pudo con Evgeni Zmysla en el 5' y acto seguido Mykola Grytsyna obligó a realizar una gran intervención a un Juanjo que realizó una sensacional primera parte.
Otros dos goles
Mientras, el Barça exhibía pegada y Mario Rivillos estableció el 2-0 en el 8' tras una pared con Joselito, mientras que Roger Serrano no falló esta vez a pase de Juanjo para lograr el 3-0 en el 10'.
A partir de ahí, el Barça bajó un poco la intensidad y el campeón bielorruso se creció. Juanjo se exhibió en el 14' a disparo del capitán Gorbenko, quien disparó ligeramente desviado en el 14'.
Además, Zhigalko estrelló un remate en el poste en el preludio del 3-1, obra del brasileño Beto en el 19' asistido por Gibadullin, un gol que hacía justicia a lo vivido en los últimos minutos.
Presión bielorrusa
La segunda parte fue claramente local. Es entendible que el Barça se relajase y que el Stalitsa Minsk quemase sus naves para tratar de regalar una victoria a sus aficionados.
Y eso que las dos primeras llegadas fueron azulgranas, en una vaselina ligeramente alta de Roger Serrano y un remate por encima del larguero del joven Povill, quien tuvo mucho protagonismo.
Poco a poco, el cuadro local fue aumentando su presión y ahí emergió un colosal Dídac con media decena de intervenciones de mérito, sobre todo una mano colosal a disparo de Mykhaylo Grytsyna en el 29'.
Y en el ecuador del segundo acto Aicardo evitó el gol de Beto lanzándole al suelo, aunque pudo cometer penalti en la siguiente acción por unas posibles manos.
Sentencia el Barça
Andreu Plaza paró el partido y pidió más intensidad a los suyos y el equipo respondió. Además, en una rápida transición Rivillos aprovechó un pase de Joselito para firmar en el 34', su segundo gol (4-1).
Tras adelantar a su portero en varias ocasiones como ya hizo al final del primer acto, el Stalitsa dio por fin la camiseta de arquero a su capitán Gorbenko y así llegaron los dos últimos tantos azulgranas.
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Mientras Dídac seguía realizando grandes paradas, Rivillos completó su 'hat-trick' en el 37' y Lozano pasó a la historia del barcelonismo tras firmar el 6-1 definitivo en su gol número 248 como blaugrana, uno más que Wilde. Por tanto, jornada redonda.