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Lo de Leo Messi es algo espectacular. El '10' argentino no conoce la palabra amistoso y contra Estonia, anotó un repóker de escándalo para deleitar a los aficionados que fueron a verlo en el Sadar. El exfutbolista azulgrana marcó todos los goles de la goleada de Aergentina.
El primero llegó desde el punto de penalti en el minuto 9. Era solo un aviso de lo que estaba por venir, ya que antes de cerrar la primera mitad, en el 45, recogió un buen pase del 'Papu' Gómez para, entrando desde la derecha, colocarla a la escuadra izquierda, como ha hecho en tantas ocasiones.
Llega el hat-trick
En la segunda mitad, lejos de relajarse, únicamente necesitó 2' para confirmar su hat-trick personal y el tercer gol de Argentina. En una jugada trenzada de la albiceleste, el balón le llegó a Nahuel Molina en la banda, que puso un centro raso que Leo remató de primeras, con elegancia, al fondo de las mallas.
El farol
Más listo que nadie, como si de una partida de Póker se tratara, recogió el esférico cuando los futbolistas de Estonia creían que el partido estaba parado para plantarse delante del portero y, con un toque, dejarlo sentado junto al defensor para rematar a placer.
El repóker
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Tras varios disparos a portería de sus compañeros, Messi 'tenía un imán en las botas' y el balón le cayó en el punto de penalti. Desde allí raramente perdona, no lo hizo y puso el quinto y definitivo tanto de la goleada de Argentina a Estonia (5-0).