La tragedia griega podría ir más allá del género teatral. El Olympiacos corre el peligro de terminar en la Segunda división griega o incluso en categorías inferiores por un escándalo de amaños de partidos.
El presidente y propietario del Olympiacos, Evangelos Marinakis, está acusado ante la justicia deportiva griega por presunto amaño de dos encuentros, como mínimo. Según medios griegos, los partidos en cuestión serían un Olympiacos-Veria (3-0) que se disputó en enero de 2013 y un Olympiacos-Atromitos (2-1) de febrero de 2015.
El caso del encuentro ante el Veria ya fue investigado en 2015. En un primer momento se inhabilitó a Marinakis de cualquier cargo deportivo por supuesto soborno, amaño de partidos e instigación a la coacción, entre otros cargos, pero finalmente la Federación helena decidió archivar el asunto.
Marinakis, presidente del Olympiacos des de 2010, evitó el descenso del Nottingham Forest a la Tercera División adquiriendo el cien por cien del histórico club inglés. Ahora, tras el escándalo, el rival del Barça en la cuarta jornada de Champions podría descender a divisiones menores del fútbol heleno.
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El Olympiacos ha sido el líder hegemónico del fútbol griego en las últimas dos décadas, conquistando el título en 19 ocasiones de las 21 ediciones más recientes de la Liga griega. Tan solo el Panathinaikos ha logrado cuestionar su liderazgo en 2004 y 2010.