Malas noticias desde Bélgica. El defensa del Lokeren Gregory Mertens sufrió un infarto durante la disputa de un partido amistoso ante el Genk este lunes y cayó desplomado sobre el césped. Acto seguido, recibió asistencia en el mismo terreno de juego para, instantes después, ser trasladado a un hospital.
Según informan desde Bélgica, los servicios médicos reanimaron al jugador, aunque por ahora se encuentra en coma inducido, algo que confirmó el club en su página web. "Los aficionados, la família y los amigos esperan un desenlace positivo", dice el breve comunicado.
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El partido, que evidentemente acabó siendo lo de menos, se detuvo en el instante en el que Mertens sufrió el infarto.