Mahrez, no podía ser otro. No estaba siendo el jugador decisivo de antaño pero apareció cuando tenía que hacerlo, en el descuento y en la última jugada del partido con un libre directo que se fue a la escuadra. No le temblaron las piernas. El argelino le daba el pase a la final a una Argelia que había sido mejor pero que se había dejado empatar un partido que tenía controlado. Senegal ya espera.
Suerte que estaban Belaili y Bounedjah para darle algo de gracia a esto. En una primera mitad realmente pobre, los dos artilleros argelinos fueron los únicos que trataron de hacer algo diferente y saborearon lo que era disparar a portería. El resto, asistió a un encuentro muy plano, sin grandes ocasiones y en el que el miedo lo inundó todo.
Salió mejor Argelia, gran candidata a levantar esta Copa América. Los 'zorros del desierto' fueron los grandes dominadores de la posesión en los primeros minutos, aunque sudaron tinta para llegar a la meta nigeriana. El rival, por su parte, lo confiaba todo a que sus cuatro puñales arriba lograran hacer algo. Aun así, si no hay alguien que pueda surtir balones la causa suele ir a saco roto.
Los balonazos fueron la gran solución para poder llegar a la meta de Argelia pero tan solo Ighalo logró inquietar a M'Bolhi y fue justo antes de acabar la primera mitad. Antes de eso, Argelia sí que tuvo opciones de inaugurar el marcador, especialmente gracias a la tozudez de Bounedjah, que se hartó de correr balones.
El argelino olía sangre y tuvo un uno contra uno que bien pudo significar el 1-0. Aun así, el protagonismo iba a recaer en otro hombre. Mahrez, que no había aparecido hasta el momento, lo hizo antes de acabar la primera mitad para poner un centro que Troost-Ekong se encargaría de llevar a la red de forma involuntaria. ¿La suerte del campeón?
Penalti absurdo
En la reanudación, Argelia le cedió todo el protagonismo a Nigera y el plan no le pudo salir peor. Los nigerianos no supieron proponer pero se encontraron con un discutido penalti que el VAR concedió e Ighalo no falló. Es lo que tiene cuando le das la pelota al rival y echas una moneda al aire.
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Con el 1-1, Nigeria creció ante una Argelia desdibujada. Todo esto antes de entrar en la alocada prolongación. Ahí, los 'zorros del desierto' resurgieron y de la mano de Bennacer pudieron poner el 2-1 en más de una ocasión, aunque iba a ser Mahrez el encargado de desatar la locura. El argelino, con un libre directo magistral, ajustó el balón a la escuadra para dar el pase a la final a Argelia. Senegal-Argelia, menuda final nos espera.