Camerún jugó con la calculadora y sumó un punto valioso que le deja más que encarrilada la clasificación. El duelo ante Ghana, no obstante, dejó mucho que desear. Falto de ritmo y de aproximaxiones peligrosas. Apenas una para cada selección.
Fueron los de Clarence Seedorf los que llevaron el peso del partido, y disfrutaron de una acción para establecer el 1-0. Pase de la muerte del ‘groguet’ Toko Ekambi y Asogog que se topó con la manopla de Ofori cuando ya se cantaba el gol de los ‘Leones Indomables’.
La reacción ghanesa no llegó hasta la segunda mitad, con una ocasión manifiesta para desequilibrar. Owusu Kwabena, a trompicones, sorteó adversarios tras un fallo en la salida del balón de Camerún y enganchó un derechazo que se estrelló contra el travesaño del arco de Onana.
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Ya en la recta final, el excanterano del Barça atajó una mansa incorporación del lateral zurdo Yiadom.