La Alemania de Joachim Löw, que vive horas bajas tras la eliminación del Mundial y sus malos resultados en la Nations League, encontró un oasis en el desierto durante su partido contra Rusia donde goleó con solvencia por 3-0 gracias a las anotaciones de Gnabry, Sané y Süle.
En primera instancia apareció el hombre del Manchester City, apenas cuando se promediaban los 8' de partido. Una buena combinación con Gnabry le permitió a Leroy quedar rmano a mano con el guardameta Lunev, batiéndole con su pierna menos hábil y abriendo así el marcador.
Tras esto, en el ecuador de la primera parte apareció la 'mole' Niklas Süle. Un córner que alcanzó a peinar Rüdiger le quedó al futbolista del Bayern Múnich, que solo tuvo que escorar su disparo para aumentar las distancias entre germanos y rusos.
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La goleada se consumó en la primera parte. Otra vez un hombre del Bayern, esta vez Gnabry, fue el encargado de darle números mayores al tanteador. Un muy buen pase de Havertz le dejó de cara a puerta, definiendo con mucha clase desde el borde del área y dejando claro que los segundos 45' sobraron en Leipzig.