Nuevo episodio polémico en la profesionalización del fútbol femenino español. Según informa el Diario MARCA, la RFEF ha aumentado la cuantía de las amonestaciones recibidas en los partidos de la Liga F: las tarjetas amarillas pasan de 4 a 180 euros y las rojas, de 9 a 350 euros, mismas cuantías que se cobran en la Primera división masculina.
El citado medio apunta que los clubes, que no han recibido notificación sobre este cambio todavía, están sorprendidos y ven peligrar, de nuevo, sus presupuestos establecidos para la presente temporada.
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La RFEF aplica así el artículo 52 del Código Disciplinario que recoge "las multas o sanciones de carácter económico". Además, según el mismo artículo, los jugadores -jugadoras en este caso- deberán también una cuantía por amonestación, siendo esta un máximo de 600 euros, y que en clubes profesionales masculinos suelen asumir los propios clubes.