Las árbitras piden la profesionalización del colectivo

El Comité Técnico de Árbitros (CTA) de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) convocó una rueda de prensa para presentar el Seminario Arbitral Femenino previo al inicio de la competición de la Primera Iberdrola, y en la que se ha hablado de la profesionalización del colectivo arbitral, a falta de un acuerdo entre RFEF y la Liga.

En la rueda de prensa participaron Luis Medina Cantalejo, presidente del CTA, Yolanda Parga Rodríguez, responsable del arbitraje femenino en el CTA, y las árbitras internacionales Marta Huerta de Aza y Guadalupe Porras Ayuso, que participaron este mismo verano en dos competiciones de máximo nivel, como son la Eurocopa de Inglaterra y en el Mundial Sub-20 de Costa Rica.

En este sentido, las colegiadas destacaron la complejidad de compaginar el arbitraje con otros trabajos, cuando las exigencias competitivas les piden estar mucho tiempo fuera de casa.

"Compatibilizar un trabajo con el arbitraje con un verano como el que hemos tenido es imposible. No se está pidiendo nada fuera de lo común, se pide algo sensato. A mi me generaba dolor de cabeza encajar los vuelos para no faltar al trabajo o tener que justificar mis faltas, o utilizar vacaciones para ir a arbitrar. Al final es ganar calidad de vida y para la profesión", dijo Marta Huerta, que también es madre.

La colegiada del comité tinerfeño explicó que ha podido dejar su profesión de maestra porque pita en partidos de la liga masculina, igual que Guadalupe Porras, aunque muchas compañeras no pueden hacerlo.

"Me parece muy injusto que con el apoyo institucional que tenemos se nos deje un poco de lado. No vas a pedir lo que ellos pero si tener las mismas facilidades. Sacamos todos pecho al hablar de igualdad, pero ahora es el momento de igualdad. Menosprecio no se si es la palabra, pero que hay que hacer algo seguro", agregó.

En este sentido, la asistente extremeña Guadalupe Porras habló de los "muchos problemas por tener que viajar" que se encontró antes de tener contrato y lo consideró fundamental para la evolución de la competición.

"Es importante la lucha por ese contrato, somos el único estamento que no somos profesionales y si queremos seguir evolucionando y tener más calidad en esta categoría todo pasa porque las árbitras tengamos esos contratos. Por 160 euros como asistente de un partido una no puede dejar un trabajo, no se le puede exigir, esa cifra no va a acorde a la liga que tenemos que es profesional", apuntó.

El presidente del CTA destacó que "la voluntad de la Federación de respaldo es absoluta", y que "el Consejo se pronunció, la Federación lo ha hecho y creo que tenemos que llegar a un entendimiento. No tengo ninguna duda de que se llegará a un acuerdo".

Sobre la posibilidad de que en breve una árbitra pueda actuar como principal en la máxima categoría masculina, Medina Cantalejo dijo no tener "ninguna duda" y que "en el momento en que una mujer esté en el centro del campo va a ser un trampolín y un espejo para todas las niñas que quieran arbitrar".

Las dos árbitras participan este viernes por la tarde en la reunión con los entrenadores de los equipos de la liga femenina, que es uno de los actos programados en el seminario en el que participan las 66 colegiadas de Primera y las 41 de Segunda femenina.