Las finales no se juegan, se ganan. Y solo un equipo con esta mentalidad ganadora podía afrontar así la final a cuatro de la Copa de la Reina apenas pocos días después de la dolorosa derrota en Turín. No era fácil hacerlo con tan poco tiempo de margen y teniendo que superar primero al Real Madrid. Han sido unos días duros para la plantilla azulgrana. Sin embargo, como dijo Aitana tras la semifinal, los equipos grandes se ven en los peores momentos. Y, sin duda, este equipo ha sabido pasar página y demostrar que sigue siendo enorme.
El Estadio Santo Domingo de Alcorcón vio al Barça sonreír de nuevo. Tras golear al Sporting de Huelva (6-1) en la final con una exhibición fiel a su estilo, las azulgranas cerraron la temporada alzando la Copa de la Reina que supuso su noveno trofeo en la historia de esta competición y el triplete a nivel nacional. Cualquier otro final hubiese sido injusto.
Temporada de récords
"No solo celebramos los títulos de nuestro equipo, celebramos el triunfo del fútbol femenino" publicó el club en sus redes sociales tras la victoria. Y es que el triunfo del Barça es el triunfo de todas. Esta temporada será siempre recordada por el impacto social que ha logrado este grupo de jugadoras. Dos récords mundiales de asistencia en el Camp Nou, ante el Real Madrid y el Wolfsburgo, y un desplazamiento masivo a Turín. Y los tres hitos fueron aplaudidos por los rivales. Alexia es la deportista que más camisetas ha vendido de todo el club y fue la primera en ganar un Balón de Oro que abrió el camino a tantas niñas que sueñan con ser futbolistas. Un gran paso adelante de la mujer en el deporte.
Aunque no solo se trata de ganar. Lo que ha hecho grande a este equipo es cómo ha ganado. Ha dominado en juego y ocasiones en prácticamente todos los partidos disputados. Prueba de ello son las 45 victorias de 47, los 221 tantos a favor -en todas las competiciones- y los (solo) 23 encajados. El oro en la Liga, en la Copa y en la Supercopa. Y una digna plata en la Champions.
Ganas de más
Ahora es momento de poner punto y final a esta histórica temporada. Será un verano movido, con la Eurocopa en julio. Habrá bajas y refuerzos en la plantilla. Y, después de las vacaciones, jugadoras y cuerpo técnico empezarán a trabajar de nuevo.
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Porque esta temporada ha sido casi perfecta. Un ‘casi’ que no es suficiente para un equipo tan competitivo. Porque hay ganas de más. De mucho más.