El Barça B sigue en caída libre. El filial azulgrana perdió en su visita al feudo de l’Hospitalet (2-0) y suma su segunda derrota consecutiva tras cuatro partidos disputados. Los de Garcia Pimienta se colocan antepenúltimos en el Grupo 3-A de la Segunda B con cuatro puntos y lo que es más preocupante, con un solo tanto a favor en 360 minutos.
El partido inició con novedades en el once titular. Garcia Pimienta, condicionado por las bajas del primer equipo, dejaba a Konrad de la Fuente en el banquillo. En su lugar regresaba al once el brasileño Gustavo Maia. Con él, Zeballos y un Nils Mortimer que se estrenaba como titular. Los azulgrana arrancaron el partido con un nivel de intensidad óptimo ante un rival que tenía muy claras sus intenciones y que no lo pondría nada fácil. Los azulgrana fueron los primeros en avisar con una acción de Zeballos y un disparo manso de Gustavo Maia que terminaba a las manos de Aliaga. Sin embargo, la ocasión más clara llegaría a los pies del delantero Salinas, que remataba y obligaba a Iñaki Peña a despejar el balón con una actuación magistral.
Por si fueran pocas las lesiones que arrastran los chicos del filial, a Pimienta se le sumaba la de Oriol Busquets. El centrocampista se rompía a los 30 minutos y en su lugar entraba Lucas de Vega. El brasileño entró bien al partido y dio rapidez a la circulación de balón. A su lado estaba Nico González, al que Koeman sigue de cerca, y que protagonizó la jugada con más peligro del Barça B. Un centro suyo desde la derecha no lo podía rematar Nils por centímetros.
En la segunda parte, Pimienta sentó a un Gustavo Maia desaparecido y dio entrada a Konrad de la Fuente. El estadounidense se erigió como el gran referente ofensivo y todas las jugadas pasaban por sus botas, inquietando la portería de Aliaga. También lo hizo Zeballos, pero su remate de cabeza lo paraba el mismo Aliaga. Por su parte, l’Hospitalet avisaba a un filial del Barça que empezaba a sufrir en tareas defensivas. La pareja Ramos Mingo y Arnau Comas, que había sido de lo mejor en la primera parte, recibía pocas ayudas y eso lo aprovechó el conjunto local para marcar el primer tanto del partido. El autor era el ex blanqiazul Christian Gómez, que recogía un rechace de Iñaki Peña tras tiro de Ripoll para perforar la red azulgrana. El tanto hundió a un Barça B que está faltado de confianza. No les sale nada a los de Pimienta y eso lo saben bien sus rivales.
NOTICIAS RELACIONADAS
Con el marcador adverso, Pimienta cambió el plan. Alejandro Balde reaparecía de lesión y entraba para dar dinamismo a la banda izquierda azulgrana. De nada sirvió ya que el siguiente gol también fue obra de L’Hospitalet. En esta ocasión era Ripoll quien se plantaba delante de Iñaki Peña y lo superaba con una bonita vaselina. Partido sentenciado a falta de diez minutos. El Barça B lo intentó más con corazón que con cabeza pero el resultado no se movió. Un gol en cuatro partidos y antepenúltimos en la clasificación. La mala planificación del verano está condenando a un grupo que poco más puede hacer.