Para Peñarol el partido ante Miami United, un equipo de lo que puede ser considerada la cuarta división estadounidense, tuvo un trago un poco amargo y que solamente pudieron empatar a dos goles, pero el evento en sí fue un rotundo éxito.
A la misma vez, el poder conseguir este partido fue uno de los momentos cumbres de un equipo que se ha creado con la posibilidad de unir a una comunidad a través del fútbol. En este estadio llegaron 11,173 espectadores para presenciar un partido histórico para las dos entidades.
Los aficionados llegaron desde ciudades como Toronto y Boston para apoyar al Manya y ahí vieron a su equipo en el Ted Hendricks Stadium de la ciudad de Hialeah.
El primer gol llegó al cuarto minuto de juego cuando Loli Piñeiro recibió un centro y le ganó a su defensor para darle la ventaja el equipo carbonero. Piñeiro dobló la ventaja en el minuto 43 cuando otro balón en el área le llega y remata para estar un poco más cómodos yendo al segundo tiempo.
Los segundos 45 minutos, fueron más tranquilos aunque Miami United siguió apretando y luchando en la mitad de la cancha. Peñarol puso a sus suplentes y el equipo perdió un poco de precisión en su juego. En el minuto 75, Juan Fuenmayor conectó de cabeza un centro que llegaba por derecha y el partido estaba 2-1.
El gol de empate llegó tres minutos más tarde gracias a un centro al áre que ganó el guyananse Chris Nurse. Nurse, excapitán de la selección de su país, fue fichado la semana previa al partido y fue clave para Miami United en el segundo tiempo.
“Si te cuento lo que fue mi semana, no lo creerías,” dijo Nurse al termina el partido. “Para mi, poder anotarle a un equipo con la historia de Peñarol es algo impresionante.”
“No conocíamos a Miami United, voy a ser honesto,” dijo el lateral carbonero Rodrigo Rojo. “Ellos tienen jugadores con calidad y lo demostraron en la cancha. Fue un privilegio por estar aquí y jugar con ellos.”
MUESTRA DE AMOR
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Para Peñarol este campamento fue muy especial ya que se encontraron con varios fanáticos que viven en el exterior. Por eso varios jugadores veteranos tomaron la responsabilidad de conectar con ellos. Los que tomaron la iniciativa fueron Cristián Rodríguez y Fabián Estoyanoff. El ex Atlético de Madrid y Celta de Vigo respectivamente fueron en varias ocasiones a firmar autógrafos y tomarse fotos con los hinchas que se hicieron presente en la ciudad de Hialeah. Uno por uno, “El Cebolla” tomaba fotos y hasta firmó teléfonos inteligentes para la gente que iban acercándose. Tanto fue la algarabía, que tomaron un par de minutos más para comenzar el segundo tiempo.