En Ecuador sucedió este fin de semana algo bastante insólito. En un partido de primera división entre River y Aucas aparecieron unos invitados especiales nada amigables. Se trató de una invasión de abejas que dejaron imágenes bastante cómicas de jugadores, árbitros y policías huyendo despavoridos de la invasión animal.
De hecho el colegiado tuvo que ser atendido por picaduras. Solo se habían disputado diez minutos de encuentro y el colegiado decidió aplazar el partido hasta este lunes. Si las abejas lo permiten.