Las redes sociales son un trampolín para los internautas en busca de la fama; muchos usuarios muestran su belleza, a veces detallada por el Photoshop, para ganar miles de 'me gusta' y conseguir un número considerado de seguidores. Otros, en cambio, prefieren llamar la atención realizando acciones temerarias como fotografiarse desde un rascacielos o conducir de manera inapropiada.
Este último caso ha tomado las portadas de varios medios internacionales tras el fallecimiento de un youtuber por conducir una moto con los pies mientras se grababa. La irresponsabilidad del ruso Artiom Boldyrev le ha llevado a la muerte.
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El joven de 33 años, que cuenta con 288 mil seguidores en Youtube y otros 42.000 en Instagram, colisionó contra un coche que invadió el carril contrario. Aunque el influencer no tenga la culpa del tráfico accidente, éste podría haberlo evitado si hubiera conducido con las manos.