Mike Tyson no pudo entrar en Chile. El ex campeón mundial de los pesos pesados será deportado durante la madrugada del viernes a Estados Unidos después de que la Policía Internacional (PDI) le impidiera la entrada en el país al no cumplir con la Ley de Extranjería, según informaron este jueves los medios chilenos.
Una ley que especifica que se prohibe "el ingreso al país de todo extranjero que cuente con antecedentes negativos y/o condenas en su país de origen". Y la lista de Tyson es destacada.
Fue acusado de violación y condenado en 1992 a seis años a prisión, cumpliendo tres, además de pasar a figurar su nombre en la lista de delincuentes sexuales.
Siete años después fue sentenciado a un año y multado por una pelea con dos motoristas en un incidente de tráfico... otros nueve meses en la cárcel.
Y sigue la lista una nueva condena en 2007, esta vez por posesión de cocaína y conducir bajo la infuencia de narcóticos, lo que significó tres años de libertad condiciones y su entrada en un centro de rehabilitación.
El ex boxeador había viajado a Chile para ejercer de anfitrión en la ceremonia de los Space Awards, que premian a las mejores películas de acción, y también estaba previsto que ofreciera una rueda de prensa en el Hotel Intercontinental de la capital, Santiago de Chile.
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Quizá alguien debería haberle prevenido de la regulación del país al que se dirigía antes de que Tyson tuviera que pasar por el bochorno de verse escoltado por la policía en el aeropuerto... de donde no pudo, ni siquiera, salir.