No estará en los octavos de final el Braga de Fernando Trincao y Abel Ruiz. El Glasgow Rangers certificó su pasaporte a lo grande, sometiendo a los portugueses también en su propio estadio. Los 'arsenalistas', que soñaron con el 0-2 de Ibrox, se despiden de Europa. 4-2 para los escoceses en el acumulado.
Apareciendo Trincao por todos los frentes de ataque, con mucha movilidad, buscando su descaro y profundidad para resquebrajar la muralla cimentada por Steven Gerrard. Pero al Braga se le apagaban las luces en la línea de tres cuartos. Dos incursiones de Nuno Sequeira por la derecha sin premio. Paulinho y Fransérgio ni intimidaron a McGregor con sus testarazos. Escaso bagaje ofensivo.
La apuesta escocesa por el contragolpe desmoronó a la endeble retaguardia 'arsenalista'. Raul Silva y Carmo eran un mar de dudas. Hagi les sacó los colores. Perdonaban los 'protestantes'. Kamberi y Kent no acertaron en dos ocasiones manifiestas ante Matheus, el verdadero protagonista de los lusos. El brasileño detuvo un penalti en el añadido tras unas imprudentes manos de su compatriota Silva. Hagi ejecutó fuerte y a su izquierda. Ahí apareció el guardameta para poner la manopla dura y dar vida a los 'arzobispos'.
La posesión y el empuje de los portugueses no fue suficiente. Amorim apostaba 'all in'. Cambios de carácter atacante. Pero ni así. Pertrechados en su parcela, el Rangers salió de la cueva para sorprender. Pase de Hagi a la espalda de la desguarnecida defensa del Braga y Kent que cruzó el balón a Matheus. Rozó el portero el cuero, pero no evitó el 0-1.
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Las prisas son malas consejeras y a los lusos le invadieron todas en busca de un gol que les metiera en la eliminatoria. Un remate de Paulinho a la cepa del poste tras gran centro de Trincao fue lo más cerca que estuvo el cuadro de Amorim del empate. El 'cerrojazo' de Gerrard le vale para estar en octavos de final.